Daniel Martín Peixe se instalará en Los Angeles para integrarse en el equipo de ´Rapunzel´, el nuevo proyecto
de la factoría americana. En noviembre, el cine estrenará su ´Planet 51´, el filme de animación español más ambicioso.
Daniel Martín Peixe (1977) estudió ilustración con éxito en la escuela de Artes y Oficios de Palma. Buen seguidor de Bola de drac, el boom de la animación acontecido en los 90 le motivó a ´dar vida´ a sus dibujos. Se arrancó primero a secuenciarlos en plan casero, jugueteando con las esquinas de los post-it y libros. Un manual de Raúl García –La magia de los dibujos animados– le «inspiró definitivamente» y le «convenció de que era posible vivir de ello». El próximo noviembre, tras haber participado ya en grandes proyectos como Valiant (2005) o Planet 51 se marchará a California para ponerse al servicio del equipo de Disney responsable de Rapunzel.
La factoría con más solera del mundillo ha decidido incluir a Peixe entre los animadores encargados de adaptar el clásico cuento de los Hermanos Grimm. Está previsto que Rapunzel llegue a las salas de cine en Navidad de 2011. «Mucha ilusión y respeto», siente este mallorquín, hijo de granadino y portuguesa. Afincado en Madrid, se instalará en Los Ángeles por un tiempo «indefinido». No descarta seguir en futuros proyectos Disney, donde apuestan fuerte por él. Y donde no es nada fácil meter la cabeza: «Para los europeos es más complicado. El nivel de exigencia es muy alto; te piden una experiencia mínima de tres años». «Tienes que ser alguien muy bueno para que te paguen el visado», resume con modestia, aunque consciente de un talento que va más allá de la propia animación: «Conocer el método de los actores es igual de importante. Los personajes tienen que estar vivos».
Hambriento de oficio, el ilustrador y animador mallorquín quiere «seguir aprendiéndolo» en California, todavía frotándose los ojos (y las manos) por poder trabajar a la vera de gente «a la que siempre he admirado». Su Rapunzel –»un cuento de hadas» que «modernizará» y añadirá «sentido del humor» al original– no será su primera colaboración con Disney (Valiant), sí la más importante. Con todo, también «había tenido una oferta para hacer Toy Story 3, pero con la fusión con Pixar se canceló», recuerda.
El actualizado currículum de Peixe fue el que le volvió a abrir la puerta de los padres de La Sirenita o El Rey León. El mallorquín los ´convenció´ ya terminada Planet 51, el último gran proyecto en el que ha participado, como animador y supervisor de un equipo de ocho personas. Las expectativas del filme, con capital mayoritario español, son altas. Ha costado 60 millones de dólares, necesarios para manufacturar «un producto competitivo», a la altura de Pixar o Dreamworks. Dirigida por Jorge Blanco y escrita por Joe Stillman (Shreck; Shreck 2), la película está producida por Ilion Animation, un estudio fundado en 2002, en Alcobendas, por los responsables de Pyro; creadores del videojuego patrio más famoso y vendido de la historia: Commandos. La cinta, que se estrenará el 20 de noviembre en Estados Unidos, llegará al resto del mundo una semana más tarde. Narrará las correrías de un astronauta en un planeta de verdes extraterrestres, aún instalados en una suerte de años 50. Las voces inglesas correrán a cargo de Jessica Biel, Gary Oldman o John Cleese.
Un vistazo más retrospectivo a sus logros confirma que el recorrido del mallorquín hasta llegar a Disney ha sido importante; «reciclado» incluido, pues, preparado para la animación tradicional, tuvo que aprender los mecanismos del trabajo con ordenador. En Londres, donde se instaló en 2000, colaboró en las campañas publicitarias de empresas como Nesquick, animando a su espídico conejo para la televisión desde el prestigioso Uli Meyer Studio. En Berlín, ya en 2005 participó en el largo Happily N´ever After, de Paul Bolger. En Valencia, penúltimo paso antes de Madrid, animó para el Disney Channel, WildBrain o Mattel, como miembro del Keytoon Studio.
Artículo de Carlos Mulet, del Diario de Mallorca.
