Desde Microsiervos nos llega una nueva manera de entender y visionar la Saga galáctica más famosa de todos los tiempos. La solución no tiene desperdicio.
El orden en que se grabaron y proyectaron las películas de la saga de La guerra de las galaxias, para muchos el orden natural es
IV, V, VI, I, II y III
Pero el orden cronológico de la propia saga sería
I, II, III, IV, V y VI
¿Cómo debería verlas alguien que no las haya visto nunca? Una propuesta bastante bien razonada que vi pasar por Neatorama proviene de Rod Hilton, quien plantea verlas ordenadas a machete, que no es sino este otro ingenioso orden:
IV, V, II, III y VI
La ordenación a machete tiene varias ventajas, entre ellas que no desvela la relación Vader-Luke hasta el Episodio V –que de otro modo quedaría desvelada por las precuelas– y además permite disfrutarlas en «una sucesión de emociones y altibajos más fuertes» según su defensor.
Pero lo más avispados ya se estarán preguntando… ¿Dónde queda el Episodio I? Fácil: eliminado de la saga. Eso permite ahorrarse no solo a Jar-Jar Binks sino también la escena de acción de la carrera de vainas, el rollo de los midiclorianos y las concepciones virginales… Sin todo eso, «en realidad no te pierdes gran cosa», dicen.
Además, conviene volver a ver La amenaza fantasma en el nuevo formato por una poderosa razón: la proyección es digital, y hay una diferencia enorme entre las copias originales en 70 mm de hace más de una década –o de las televisiones actuales– y la versión digital de pantalla grande: tanto que se pueden ver hasta los más ínfimos detalles en cada secuencia, aunque haga falta verla varias veces para fijarse en todos ellos.
Fuente | Microsiervos