Publicado el miércoles 15 abril 2009
Sacarle jugo a una franquicia de películas como Fast and Furious debe ser algo realmente fácil. Puede que los argumentos de las películas no sean ninguna maravilla, y que muchos de los locos por las cuatro ruedas nos echemos las manos a la cabeza viendo algunas flipadas que se marcan los protagonistas.
Pero no se sabe muy bien como, y aunque todos sepamos que son malas como ellas solas, acabamos yendo a ver estas películas, lo cual repercute (positivamente) directamente en el bolsillo de la productora. Así las cosas, y cuando apenas lleva un par de semanas en la cartelera la cuarta parte, parece ser que los estudios Universal Pictures ya han dado la luz verde para una quinta secuela.
Por el momento, lo único se sabe es que alguna de las localizaciones de la película serán en Brasil, y que estarán los dos protagonistas principales, Vin Diesel y Paul Walker. La verdad es que tras ver el final de la cuarta película, que es bastante abierto, todo es posible. ¿Seguirá funcionando el formato una secuela más? Mientras dé dinero a sus productores, seguro que vemos más y más partes.
En todo caso, uno se llega a preguntar por qué no nos traen al resto del mundo películas mucho más interesantes sobre coches, como Love The Beast, o video reportajes como Truth in 24 (lo mejor que he visto en muchos años). La respuesta es sencilla: el espectador tipo de Fast and Furious no va por ver coches, sino por ver la acción, las animaladas, y el rollo macarra. Dudo que muchos de los espectadores de este estilo supieran apreciar cualquiera de estos dos video reportajes que te comento.