Cada genio malvado necesita una morada donde hacer sus quehaceres diarios: desde elegir el color de las letras de la compañía a conspirar para la dominación del mundo. Generalmente, estas moradas son complejos o fortalezas construidas secretamente en montañas, o en agujeros de volcanes inactivos… incluso bases submarinas. Pero si vas a hacer algo de escala mundial, ¿por qué no hacerlo con algo de estilo?
No, no voy a tildar a George Lucas de malvado. Un genio, seguro que es. Aunque sus últimas pelis hayan sido en dirección equivocada, poco de malo se puede decir del que nos trajo American Graffiti, Star Wars, y En Busca del Arca Perdida.
Aunque Lucas no sea un malvado, sigue teniendo su fortaleza desde donde controla su imperio. Aquí vamos a contar un par de cosas sobre como ha evolucionado esa base llamada Rancho Skywalker.
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